“Varias veces me dieron ganas de botar el rosario”, cuenta una joven madre que comenzó a rezarlo pidiendo por su hijo
“La novena a la Virgen de Pompeya es la más dura que conozco; son 54 días… Nunca me gustó rezar el Rosario. Siempre me pareció que ese rezo era inútil, y que lograr rezar una decena del rosario era el colmo de mi capacidad”. Sin rodeos, la joven madre polaca Anka Kotulska reconoce que no era devota de la oración mariana que, en Akita, Lourdes, Fátima, Pompeya y otras apariciones recomienda la Sant... »