El Rosario, medio Predilecto para Consagrar el mundo y nuestra Familia a la Virgen María
El pasado 12 y 13 de octubre se realizó en Roma la Consagración del Mundo al Inmaculado Corazón de María. Para señalar la significancia del hecho, en la Plaza de San Pedro se entronizó la imagen de la Virgen de Fátima y 9 santuarios marianos del planeta se unieron –con transmisión en directo- al rezo del rosario.
La fecha fue escogida no sólo por ser octubre el Mes del Rosario, sino especialmente porque el día 13 recordamos la última aparición de la Virgen a los pastorcitos Jacinta, Francisco y Lucía en el año 1917. Ese momento además es significativo porque la Virgen les pidió que continuaran rezando el Rosario todos los días. Un mensaje que es potenciado en este Año de la Fe, para que los cristianos retornen y sigan la oración mariana del rosario como una devoción diaria… y, en comunión, así también lo pide la cruzada Un Rosario por Chile con sus siete intenciones permanentes.
Rosario mundial y permanente
El sábado 12 la imagen de la Virgen de Fátima que se venera en la capilla del Santuario en Portugal -y que sólo para extraordinarios eventos ha salido en peregrinación-, fue acogida por el Papa Francisco y los miles de peregrinos que la esperaban en la Plaza de San Pedro. Luego desde el Santuario del Divino Amor (ubicado a 15 km. de Roma) la imagen presidió la Vigila de Oración. Ahí se unieron por señal satelital los santuarios de Lourdes, Nazaret, Luján, Vailankanni, Guadalupe, Akita, Nairobi, Benneux, Częstochowa y Marian Valley, rezando cada uno cinco Ave Marías de los misterios gozosos del Rosario. Era el mundo entero, en sus diferentes lenguas, unido en la oración predilecta de María. La comunidad orante de Un Rosario por Chile, también se sumó a la súplica por la Paz.
La Vigilia continuó hasta el día siguiente cuando la imagen de la Virgen de Fátima retornó a la Plaza de San Pedro para presidir la Eucaristía. Luego, a sus pies, el Santo Padre culminó realizando la oración de Consagración del mundo a su Inmaculado Corazón. Broche de oro para esta determinante jornada seguida por millones de católicos en el mundo entero, por medio de especiales símbolos que nos unen al rosario.
La importancia de proyectar hacia nuestras familias y sociedad esta consagración, rezando a diario el Rosario -como lo promueve la cruzada nacional Un Rosario por Chile-, se sustenta también en lo dicho por Papa Francisco una semana antes de la Consagración (en el Ángelus del domingo 6): “¡El Rosario es una escuela de oración! ¡El Rosario es una escuela de fe!”
Fuente: zenit.org / vatican.va
